04-02-2009

Medicina X: Resucitación Cardiopulmonar (RCP)

(Foto: Hombre sufre paro cardiaco en la vía pública).

Vas caminando por la calle tranquilamente, de pronto eres testigo de cómo un hombre de unos cincuenta y tantos años de edad se desploma en la vereda delante de todos los transeúntes. Alguien se acerca y se percata de que el individuo no respira, a otro se le ocurre tomarle el pulso, el cual parece estar ausente; nadie sabe qué hacer. ¿Qué rayos haces?

Probablemente los más desinformados dirán “esté hombre cayó muerto”, lo cual es un punto de vista muy interesante, pero tremendamente nefasto y poco útil en la situación. Otros no tendrán idea de qué hacer, pero tendrán la gran ocurrencia de llamar a la ambulancia y quedarse mirando al pobre hombre; la ambulancia llegará después de unos 15 minutos (estamos en Chile, por cierto) y retirará el cuerpo sin vida de un hombre de unos cincuenta y tantos años de edad. Ahora bien, si el que intenta responder la pregunta tiene algún grado de preparación en primeros auxilios o en resucitación cardiopulmonar, dirá que lo que hay que hacer es recostar al hombre sobre su espalda, verificar que nada obstruya la vía aérea (abrir boca, chequear que nada se interponga entre su “garganta” y el exterior) e iniciar maniobras de resucitación: entregarle dos ventilaciones mediante respiración boca a boca y efectuar masaje cardiaco mediante 15 ó 30 enérgicas compresiones del pecho, esto habría que repetirlo hasta que llegue la ambulancia; esto es, al menos, bastante acertado y recomendable. Y, por último, podríamos tener a un experto cardiólogo que comenzaría a preguntarse qué tipo de paro cardíaco es: fibrilación ventricular (el corazón se contrae tan desordenadamente que no bombea sangre de forma efectiva), taquicardia ventricular sin pulso (se contrae tan rápido que es una contracción inútil) o sencillamente una asistolía (no hay actividad cardiaca); mientras tanto haría las maniobras de RCP antes mencionadas o vería morir al desdichado al que se le “paró el corazón”. No profundizaré en la postura del “lanza” (ladrón, timador, asaltante, ratero, bandido, delincuente, malhechor, caco, etc.) que sacaría la billetera y el celular del desafortunado y saldría corriendo como si de competencia se tratase.

Lo anterior es sólo un intento de adivinar qué respuestas podría dar el lector de estas líneas, y creo que a grandes rasgos cubre todas las posturas posibles.

¿Cuál sería la mejor manera de actuar en esta situación? A continuación trataremos el tema en mayor profundidad y daremos una respuesta adecuada, la más adecuada según algunos.


Y el corazón se detuvo…


La muerte súbita de origen cardiaco (paro cardiaco) es un problema mayor en EE.UU., eliminando entre 300 mil y 400 mil estadounidenses cada año y correspondiendo a más del 60% de las muertes por problemas cardiacos. En Chile las enfermedades cardiovasculares se mantienen como la primera causa de muerte, y probablemente las cifras en términos de porcentajes son similares a las acá mencionadas.

El paro cardiaco afecta mayoritariamente a hombres (casi 70% de los casos), que han pasado ya la quinta década de vida, ocurre principalmente en los hogares o en lugares públicos (para los casos fuera del hospital, claro) y el ritmo cardiaco en la m
ayoría de los casos es fibrilación, actividad eléctrica sin pulso o simplemente asistolía. Sólo en alrededor de la mitad de los casos los afectados reciben RCP por parte de los testigos. Si la víctima recibe RCP y atención oportuna adecuada tiene, en el mejor de los casos, un promedio de alrededor de un 18% de posibilidades de sobrevivir y de ser dado de alta (dependiendo del ritmo cardiaco en el paro y de la demora en recibir ayuda, y tomen en cuenta que hablamos de cifras de EE.UU.).

La muerte súbita de origen cardiaco está estrechamente relacionada con la enfermedad arterial coronaria, es decir que las arterias que llevan la sangre al mismo músculo cardiaco se tapan (producto del tabaco, el sedentarismo, la dieta rica en grasas y azúcares y otras causas), esto provoca muerte de parte del corazón y un paro cardiaco (en un análisis bastante simplista del caso). Obviamente hay muchos motivos para que se pare el corazón (no, el desengaño amoroso no es uno de ellos), pero el principal motivo es el expuesto en líneas anteriores.

El problema al detenerse el corazón no es sólo el mismo corazón, sino que también, y mucho más importante, es el daño potencial que se produce en el cerebro. Nuestra corteza cerebral, esa parte que nos permite razonar, imaginar, idear y ser quienes somos, es una fina capa en el exterior del cerebro, la cual no puede sobrevivir más allá de 5 minutos sin sangre rica en oxígeno. Si se nos detiene el corazón y nuestro cerebro no recibe sangre fresca durante más de 5 minutos, podemos sufrir graves daños neurológicos e incluso quedar en “estado vegetal” (se muere nuestra corteza cerebral). Este es el principal problema de quienes logran sobrevivir a un paro cardiaco; un paciente con muerte cerebral no es muy diferente a un paciente muerto.


La Cadena para Sobrevivir (Survival Chain)


(Figura 1: Cadena para Sobrevivir. Modificada de su versión original publicada por la American Heart Association en inglés. “Survival Chain”, http://learncpr.org)


La American Heart Association (traducido sería: Asociación Americana del Corazón) ha hecho campañas de educación acerca de la cadena de acciones o medidas fundamentales para enfrentar un paro cardiaco (Cadena para Sobrevivir o “Survival Chain”, en inglés), estas medidas son: Ayuda Temprana (Early Acces), RCP Temprana (Early CPR), Desfibrilación Temprana (Early Defibrillation) y Cuidados Avanzados Oportunos (Early Advanced Care). Ayuda Temprana se refiere a pedir auxilio de inmediato al servicio de emergencias. La RCP Temprana corresponde a las maniobras de resucitación, que son el tema de este artículo y que deben ser iniciadas de inmediato (antes de que transcurran los “5 minutos de oro”). Desfibrilación Temprana significa que la persona debe ser des-fibrilada (sacada de un ritmo de fibrilación), para esto se usa un aparato eléctrico que entrega una descarga eléctrica para “reiniciar” el corazón y que es operado por personal médico cuando éste llega al lugar del incidente. Y, por último, los Cuidados Avanzados corresponden a las medidas farmacológicas y de otro tipo que se administran en el hospital. Como ya dije, acá nos enfocaremos en la RCP, que junto a la desfibrilación temprana son los eslabones más importantes del tratamiento del paro cardiaco y deben de efectuarse lo más tempranamente posible. (Ver Figura 1)

La principal función de la RCP es favorecer la irrigación del mismo corazón, mediante compresiones hechas en el pecho (tórax) del paciente y, secundariamente, bombear algo de sangre fuera del corazón. Esto aumenta la probabilidad de que el corazón vuelva a latir normalmente.


RCP tradicional o RCP en su más fácil y mejor variante


Volviendo al caso de nuestro desdichado peatón, ahora tenemos claro que debemos efectuar maniobras de resucitación. Pero, ¿Cómo diablos hacemos eso?

Tradicionalmente se enseña que se debe de poner al individuo sobre su espalda, verificar que la vía aérea esté despejada (es decir, que no sea un paro producto de que se esté ahogando) e inflar un par de veces sus pulmones mediante respiración boca a boca para “hacerlo respirar” y proseguir con masaje cardiaco. Nos detendremos acá un segundo y no explicaré el cómo del procedimiento de respiración boca a boca, por ser algo innecesario y además ligeramente complicado para el común de las personas. Diversos estudios han mostrado que la cantidad de “aire” (oxígeno) en los pulmones de alguien que ha sufrido un paro cardiaco, se mantiene constante durante, digamos, unos 10 minutos. Esto significa que no es necesario perder valioso tiempo de irrigación sanguínea al músculo cardiaco para dar respiración boca a boca, pues si dejamos de comprimir el tórax del infortunado, su corazón dejará de recibir y bombear sangre y es menos probable una recuperación. Añado también que diversos estudios han mostrado que no hay diferencias significativas entre RCP con respiración boca a boca y RCP sólo con masaje cardiaco, e incluso las pequeñas diferencias observadas van en favor de la RCP con sólo masaje cardiaco.

¿No sabe qué hacer? No, importa. Sólo pida auxilio y comprima el tórax de la siguiente manera:

(Figura 2: Lo primero es llamar inmediatamente al Servicio de Emergencias. Ilustración tomada de http://learncpr.org)

Lo primero es lo primero, llame inmediatamente al servicio de emergencias. Si hay otra persona, que esa persona llame mientras usted inicia las maniobras de resucitación. (Ver Figura 2)

(Figura 3: Arrodillado a la derecha del individuo, descubra su pecho y ubique el centro de éste, justo entremedio de los pezones. Esta figura muestra referencias anatómicas simples. Ilustración tomada de http://learncpr.org)

Arrodíllese a la derecha del individuo, descubra el pecho de éste. Ponga la palma de su mano en el centro del pecho del individuo (ver Figura 3), justo entremedio de los pezones o mamelones, y ponga su mano libre sobre la que está en el centro del pecho del individuo. Con los brazos extendidos empuje firmemente el pecho del individuo hacia abajo, cargando su propio peso en las manos, de manera que comprima entre 3 y 5 centímetros el pecho del individuo (ver Figura 4). Haga esto a una frecuencia de 100 compresiones por minuto (prácticamente el doble de rápido que el segundero de su reloj). No se detenga hasta que llegue la ayuda.

(Figura 4: Con ambas manos sobre el centro del pecho del individuo, y con los brazos extendidos, empuje firmemente hacia abajo de manera que el pecho del individuo se comprima entre 3 y 5 centímetros. Realice esto con una frecuencia de 100 compresiones por minuto. No se detenga hasta que llegue la ambulancia. Ilustración tomada de http://learncpr.org).


Si usted tiene suerte y las estadísticas están de su lado, logrará salvarle la vida a una persona.


Cabe mencionar que en casos de paro cardiaco por causas respiratorias, sí es recomendable efectuar RCP en ciclos de 30 compresiones y 2 respiraciones (30:2, antes se recomendaba 15:2), este es uno de los motivos por los cuales las guías de lineamientos a seguir no han cambiado. No obstante, los paros cardiacos de causa respiratoria no son la mayoría, y muchas veces son evidentes (intoxicación por gases, sobredosis de drogas o medicamentos, obstrucción de la vía aérea por cuerpos extraños y otros).



Conclusión

Ante un paro cardiaco lo más importante es pedir ayuda e iniciar las maniobras de RCP antes de 5 minutos desde que se detiene el corazón.

¿No sabe que hacer? No importa, sólo comprima.

Efectuar RCP solamente con masaje cardiaco es al menos tan efectivo como la manera tradicional, es más fácil y por lo tanto más adecuado para ser realizado por alguien sin el entrenamiento apropiado.

¿No llega nadie? No importa, siga comprimiendo.

La RCP y la desfibrilación son el tratamiento del paro cardiaco, esto debe efectuarse lo antes posible y la RCP debe realizarse hasta que llegue el servicio de emergencias.

Rece, menos de 2 de cada 10 personas sobreviven a un paro cardiaco.


Advertencia: Esto de ninguna manera reemplaza la enseñanza formal de maniobras de resucitación o de temas médicos.


Referencias:

Bakhtiar Ali, A. Maziar Zafari. “Narrative Review: Cardiopulmonary Resuscitation and Emergency Cardiovascular Care: Review of the Current Guidelines”. Annals of Internal Medicine. 147, p. 171-179. 2007.

David J. Callans. “Out-of-Hospital Cardiac Arrest – The Solution is Shocking”. New England Journal of Medicine, 351; 7. 2004

Mickey S. Eisenberg, Terry J. Mengert. “Cardiac Resuscitation”. New England Journal of Medicine. Vol. 344; 17. 2001.

Alfred Hallstrom et al. “Cardiopulmonary Resuscitation by Chest Compression Alone or with Mouth-to-Mouth Ventilation”. New England Journal of Medicine. Vol. 342; 21. 2000.

Harrison’s Principles of Internal Medicine. 16th. Ed. McGraw-Hill. 2006.

http://learncpr.org


Espero que esto les haya entretenido, sido útil o servido de alguna manera.


Saludos,

Englishman.